Hoy le invitamos a conocer todo acerca del Espatifilo, en este artículo podrá descubrir sobre sus características, de que parte del mundo es originaria esta planta, cómo cultivarla, le enseñaremos a reconocer sus enfermedades y como curarlas, algunos consejos y mucho más!
Indice de contenido
Características del Espatifilo
Iniciemos este viaje para conocer al Espatifilo una hermosa planta que no solo tiene una característica ornamental, sino que también se ha comprobado su capacidad de purificación del aire. El espatifilo de nombre científico Spathiphyllum wallisii es reconocido bajo otros nombres comunes, entre los que podemos señalar algunos como: lirio de la paz, bandera blanca, cuna de moisés, cala, entre otras.
El espatifilo pertenece a la familia de las Aráceas, es una planta que presenta flores y frutos, se trata de una planta herbácea perenne, es decir, que sus hojas son siempreverdes. Han sido identificadas más de treinta especies de este género, de las cuales la gran mayoría es utilizada como planta ornamental de interiores.
Se caracteriza por ser una planta herbácea, que presenta un desarrollo de crecimiento vertical, pudiendo alcanzar una altura de hasta 50 centímetros. Una de las características más llamativas del espatifilo son sus hermosas hojas de color verde oscuro y brillante, presentan una forma lanceolada, las cuales son sostenidas por un largo pedúnculo. Siendo una planta cuyo follaje en muy llamativo, esta característica es notablemente superada por la presencia de sus hermosas inflorescencias, el espatifilo se caracteriza por tener una abundante floración.
Son Inflorescencias que nacen desde la base de las espatas o brácteas, que no son más que hojas modificadas que generalmente presentan un color blanco. La inflorescencia conocida como espádice es donde se distribuyen las flores apiñadas, lo que las hace ser plantas muy atractivas, porque además sus flores suelen durar por muchos días, haciéndola una perfecta especie para decorar interiores.
Es importante señalar que esta especie es vulnerable a recibir los rayos de sol directo, pero debe ser ubicada en sitios luminosos para promover su desarrollo y floración. No es muy tolerante a las corrientes de aire frío, prefiriendo temperaturas entre los 20 y los 24 grados centígrados. Otra de las características importantes de esta planta es su capacidad probada de purificar el aire. Existen pruebas científicas que señalan que el espatifilo es capaz de purificar del aire las partículas de xileno, tolueno, alcoholes, acetona y benceno, por lo que no solo se trata de una especie ornamental.
Origen
Esta hermosa planta se dice que es originario de las selvas tropicales, las cuales se encuentran en Suramérica, sin embargo, se dice que también es procedente de México y parte de Asia, específicamente Malasia y la oeste del Pacífico.
Podemos entonces señalar que tiene un amplio rango de distribución y que se establece en regiones con climas tropicales. El espatifilo es generalmente confundido con el Anturio, sin embargo, existen importantes diferencias a conocer, la primera de ellas es la forma de la espata que protege a la inflorescencia en el Anturio tiene una definida forma de corazón, mientras que en el espatifilo estas hojas modificadas son alargadas, generalmente son comparados con velas de barcos.
Cultivo del Espatifilo
El cultivo de Espatifilo tendrá éxito si somos cuidadosos con los factores que determinan su desarrollo, por lo que es muy importante prestar atención a la información que desarrollaremos a continuación. Como debemos suponer uno de los parámetros más importantes es el sustrato en el que crecerá el Espatifilo, debido a que los mecanismos de crecimiento y desarrollo en los seres vivos se establecen o activan a través de la alimentación.
Si bien las plantas se alimentan a través del proceso fotosintético, es decir, utilizando la luz solar y por ello las plantas son consideradas los productores primarios, también deben complementar dicha alimentación con los nutrientes que captan a través de sus raíces, los cuales se deben encontrar disponibles en el suelo.
Cuando nuestras las plantas se encuentran en un lugar confinado como es una maceta, entonces debemos ir reponiendo esos nutrientes que se van agotando con el tiempo. Por lo tanto, para el cultivo del Espatifilo debemos asegurarnos que el sustrato sea de textura, permeabilidad y calidad nutritiva suficiente y adecuada para el desarrollo de nuestra planta. Por esta razón es importante que al momento de cultivar utilicemos adicional a la tierra preparada abonos o fertilizantes que garanticen la buena alimentación del Espatifilo.
La mejor época para abonar si nos encontramos en un país de clima estacionario es a principios de la primera o a principios del verano, debido a que es la época en la que las plantas activan su desarrollo vegetativo y necesitan mayor cantidad y calidad de nutrientes en el sustrato.
Es muy importante no excederse en la cantidad de abono, para evitar hacer daño a las raíces de la planta. La mezcla de suelo que debemos realizar para colocar en nuestra maceta es muy sencilla, solo debemos asegurarnos de unir muy bien un poco de arena, turba y mantillo en partes iguales. El sustrato debe ser poroso y como las raíces del Espatifilo no se desarrollan mucho, la maceta que vamos a utilizar no tiene que ser de gran tamaño.
Dentro de las condiciones que debemos establecer para el crecimiento saludable del Espatifilo es una buena iluminación, la cual debe ser indirecta. Las condiciones de temperaturas, es una especie tropical por lo que siempre se sentirá más cómoda desarrollando en temperaturas cálidas, Se debe estar siempre atentos que su sustrato se encuentre húmedo. Con esta información que acabamos de entregarle, aseguramos que el Espatifilo se desarrolle perfectamente.
Plantación
Cuáles son los pasos que debemos seguir para plantar nuestro individuo de Espatifilo, son en realidad acciones muy sencillas y que ya hemos ido señalando con anterioridad. Lo primero que debemos realizar es seleccionar nuestro individuo de Espatifilo que vamos a cultivar o a trasplantar, en ambas acciones se deben seguir los mismos pasos. Cuando vamos a realizar el trasplante de una planta de Espatifilo, es como si la plantáramos nuevamente, por lo que es válido seguir los mismos pasos.
Preparamos el sustrato en el que vamos a colocar al Espatifilo, para ello como ya señalamos previamente debemos realizar una mezcla en partes iguales de arena, turba y mantillo. Existen varias opciones que funcionan perfectamente bien como fibra o turba en la preparación del sustrato, existen inclusive estudios científicos que han comprobado que para esta especie funciona perfectamente la utilización de fibra de coco, el cual puede ser en forma de aserrín de coco.
También puede ser utilizada la cáscara de arroz e incluso el bagazo de caña, debido a que este tipo de texturas aportan porosidad al suelo, lo cual es muy conveniente para el desarrollo del Espatifilo. Adicionalmente a la porosidad que le confiere este tipo de materiales al suelo, también mejora la cualidad de densidad aparente y de partículas, por lo que contribuyen a mantener la humedad en el suelo e incrementar los niveles de aireación.
Luego que tengamos listo nuestro sustrato, debemos seleccionar la maceta en donde vamos a colocar nuestra planta, la misma puede ser de plástico o de cerámica. Vamos a colocar en el fondo de la maceta material granular para evitar el encharcamiento, cuando colocamos una capa de piedras de tamaño mediano en el fondo de nuestra maceta, estamos asegurando que el exceso de agua que no esta siendo captada por nuestra planta, no se empoce o encharque, sino que salga al exterior, lo cual es bueno para nuestro Espatifilo.
Posterior a la colocación de esta capa de material granular, entonces vamos a colocar sustrato hasta las tres cuartas partes de nuestra maceta. Este sustrato no lo vamos a compactar, recordemos que a los Espatifilo les agrada el suelo poroso. Luego de colocar el sustrato entonces si podemos proceder a colocar en la maceta a nuestro ejemplar de Espatifilo, de manera muy delicada vamos a tapar sus raíces con más sustrato, fijamos nuestra planta, agregamos un poco de agua para humedecer el sustrato y nuestra planta a quedado lista.
Dependiendo de la condición del suelo utilizado, recordemos que es bueno colocar un poco de abono para suplir las necesidades de minerales y vitaminas de la planta. Cuando nuestra planta de Espatifilo crezca, podemos realizar un trasplantarse hacia una maceta un poco más amplia.
Iluminación y temperatura
Ahora vamos a comentarles sobre las necesidades de Luz y Temperatura de esta bellísima planta, como ya hemos señalado el Espatifilo necesita de mucha iluminación, es una planta de grandes hojas verdes que utiliza de manera muy efectiva la luz solar, sin embargo, no puede recibir este tipo de energía de manera directa, porque es muy vulnerable a los rayos directos del sol, es por ello que debemos procurar para ella un espacio, en donde la iluminación sea abundante, pero indirecta.
Es por ello que el Espatifilo se adapta muy bien al interior de nuestro hogar o de nuestra oficina, pero cuando la colocamos en un sitio donde tiene muy buena iluminación. Si decidimos plantarla directamente al suelo de nuestro jardín, es importante que seleccionemos un sitio en donde este sombreado e iluminado. En este punto es de suma importancia acotar, que la sombra natural puede venir dada por otra planta, sin embargo, debemos identificar que esa planta que le dará sombra al Espatifilo, sea compatible con las necesidades de nuestra planta.
Este punto es muy importante porque si no son especies con necesidades de humedad similares, por ejemplo, entonces en lugar de generarse una simbiosis entre ellas, es posible que derive en una competencia, en donde una de las especies saldrá desfavorecida. Una de las características de la que debemos estar muy atentos, es del color de las hojas del Espatifilo, cuando veamos señal de quemaduras y se comiencen a poner amarillentas, es muy posible que nuestra planta este recibiendo más sol del que es capaz de soportar, así que es recomendable reubicarla.
Por el contrario si ves que tu espatifilo se ve saludable pero no florea, entonces puede ser la señal de alerta, de que nuestra planta no esta recibiendo la cantidad de iluminación necesaria, por lo que debemos reubicarla hacia un lugar más iluminado. En referencia a los niveles de temperatura, recordemos que el espatifilo es una planta de origen tropical, por lo tanto, se adapta y tolera las temperaturas cálidas, por ello si procuramos que la planta se mantenga en temperaturas que oscilen entre los 15 y 25 grados centígrados, es lo ideal.
Los espatifilo son muy susceptibles a las bajas temperaturas, por lo que le aconsejamos, si usted se encuentra en una región en donde el clima es estacional y su espatifilo se encuentra en el exterior de su hogar, el mismo se encuentre plantado en una maceta, en lugar de hacerlo en el suelo directo, esto con la finalidad que usted pueda mudar su espatifilo en los tiempos en que las temperaturas son muy frías.
También esta planta es sensible a las ráfagas de viento, las cuáles en oportunidades promueven cambios bruscos de temperatura, por ello si la tiene ubicada en el interior de su hogar cerca de una ventana para que reciba suficiente iluminación, es importante que esa ventana no se abra de manera frecuente, mucho menos permanente, para evitar que la planta se encuentre expuesta a las ráfagas de viento. Cuando las condiciones de temperatura e iluminación son adecuadas, nuestra planta de espatifilo florecerá de manera ininterrumpida casi todo el año, lo cual es maravilloso.
Riego
Bien ya que conocemos las condiciones de iluminación y temperatura, vamos a dar a conocer cuáles son las condiciones de humedad que debemos proveer, a través del riego a nuestro espatifilo. Una buena noticia es que el riego del espatifilo no nos quitará mucho tiempo, ya que mientras tengamos el sustrato adecuado, la humedad se mantendrá por mayor periodo de tiempo, por lo que los riegos no deben ser tan frecuentes.
Es importante siempre tener en cuenta en referencia al riego, más que la cantidad de días a la semana en la que debemos regar, la época del año en la que nos encontramos y la calidad de humedad del sustrato. En la época de verano la frecuencia de riego debe ser mayor, que cuando nos encontramos en época de invierno, sin embargo, adicional a ello, es de suma importancia siempre verificar el nivel de humedad del sustrato para decidir si el riego es necesario o no.
Cuando los dueños del espatifilo se establecen un cronograma de riego, como, por ejemplo, en verano riegan 4 veces a la semana y en invierno una sola vez a la semana y no verifican la humedad del sustrato, es posible que se puedan estar promoviendo condiciones de exceso de humedad en la planta, lo cual conllevará a la presencia de enfermedades.
También puede suceder un efecto contrario, que esas cuatro veces a la semana sean insuficientes, porque las temperaturas del verano son más elevadas para ese momento o que una sola vez a la semana en el invierno tampoco sea suficiente, por lo que la planta comenzará a mostrar signos de marchitez.
Es por esas razones que siempre recomendamos confirmar la necesidad de riego tocando el sustrato. En caso que las temperaturas sean muy elevadas, es muy importante pulverizar las hojas con agua de vez en cuando, para mejorar el microclima de la planta. Cuando nuestra planta ya tenga un cierto tiempo en la maceta, el cepellón, que es el bloque de tierra y raíces que se crea en la maceta, puede endurecerse, por lo que no nos percatamos de la efectividad del riego, y en la parte superior se encuentra húmedo, pero resulta que en la parte baja se encuentra seco.
Para abordar esta situación podemos realizar dos cosas, una de ella es sacar nuestro espatifilo de la maceta para remover un poco el cepellón, con ello aireamos raíces, renovamos sustrato y eliminamos la dureza que interfiere con la efectividad del riego. La otra es que sumerjamos nuestra maceta en un recipiente con agua, si llegar a tocar las hojas, cuando dejen de salir burbujas, se retira del recipiente y la colocamos en su lugar habitual, de esta manera estamos garantizando que llegue agua a toda la zona radicular de nuestra planta.
Otra manera de establecer la frecuencia de riego es asumir el riesgo de estar por encima de la necesidad de agua o por debajo de esta, utilizando las estaciones del año como referencia, en primavera aumentar la frecuencia de riego, asegurando humedad permanente. En invierno se reduce la frecuencia de riego evitando que el sustrato se seque. Crear una atmósfera húmeda es saludable para el espatifilo, si observamos que las puntas de las hojas de nuestra espatifilo se encuentran secas, esta es una señal que la humedad ambiental es muy baja.
Para generar una atmósfera más humedad podemos crear un mini bosque alrededor del espatifilo, para ello podemos seleccionar especies que necesiten mucha humedad como la Calatea y entre ellas mejoraran el micro clima del entorno. Otra acción que podemos hacer para mejorar la humedad, es colocar un plato debajo del macetero y mantenerlo con agua, para que la evaporación de esa agua aumente la humedad del entorno inmediato del espatifilo.
Es importante que, si optamos por la segunda técnica, debemos crear un espacio entre la maceta y el plato, con la finalidad de evitar que la planta se sobresature. La otra opción es pulverizar agua directamente sobre las hojas o colocar un humidificador que aumente la humedad ambiental.
Enfermedades y parásitos
Llegamos a una de las informaciones más importantes que deben manejar, ya que de ella depende mantener o recuperar la salud del espatifilo. Es muy importante señalar que en la mayoría de los casos las enfermedades y plagas aparecen en nuestras plantas, porque de alguna manera nosotros mismos estamos promoviendo su presencia, creando las condiciones para que las mismas se desarrollen.
Por ello, debemos siempre estar muy atentos a las condiciones ambientales en las que se encuentra nuestra planta, con la finalidad de garantizar su desarrollo y prevenir las enfermedades. Son varias las plagas que pueden atacar a nuestro espatifilo, vamos a comenzar por los desagradables y diminutos ácaros.
Esta es una de las plagas más frecuentes que pueden afectar la salud de nuestra planta, se trata de artrópodos los cuáles tienen un tamaño realmente pequeño de forma redondeada, son tan chicos que es muy difícil de detectarlos, por lo que en la mayoría de los casos notamos su presencia, cuando ya se observan consecuencias en la planta. Son muy dañinos porque se caracterizan por ser animales con una amplia capacidad para explorar y explotar los recursos que encuentran en su camino.
Estos animales son mayormente fitófagos, por lo que se alimentaran de las hojas, troncos, flores y frutos, es decir, de cualquier parte de la planta. La presencia de estos animales va alterar de manera importante los procesos de transpiración y fotosíntesis de la planta. Podemos notar su presencia cuando en nuestra planta empiezan a aparecer manchas en las hojas o flores de nuestro espatifilo, estas pueden ser claras o marrones. Debe ser atacada con prontitud al notar las primeras señales de su presencia, porque puede ser irreversible el daño conferido.
Otra de las plagas que pueden afectar a nuestra planta es el pulgón, estos son insectos que se alimentan de la savia de la planta y en la mayoría de los casos realizan ataques masivos, porque aparecen en grandes cantidades, una manera de detectarlos es por la presencia de hormigas en nuestras plantas, porque existe una alianza simbiótica entre ellos, debido a que las hormigas se alimentan de la sustancia azucarada que estos generan y las hormigas mantienen alejados a los depredadores del pulgón, como podemos ver, se trata de una relación ganar – ganar.
Como las hormigas son de mayor tamaño y visible a nuestra vista, su presencia nos puede ayudar a presumir que la planta esta siendo atacada por pulgones. Como el pulgón se alimenta de la savia de las plantas le quitan agua y nutrientes que esta necesita, provocando el debilitamiento de las espatifilo. Adicionalmente a ello, esa melaza que tanto gusta a las hormigas, también es promotora de la presencia de hongos y bacterias, por lo que el daño generado por los pulgones es directo y también producen un daño colateral a nuestra planta.
Como hemos señalado anteriormente, es muy posible que la presencia de estos insectos dañinos en nuestras plantas, estén obedeciendo a una práctica que estamos haciendo mal y que esta generando las condiciones propicias para su implantación y desarrollo. Es así que debemos revisar si estamos realizando un riego excesivo, o estamos colocando mucho abono, por lo que el exceso de nitrógeno, promueve la presencia de estas plagas.
Lo primero que debemos realizar es identificar el tipo de plaga que está afectando a nuestra planta para poder accionar de manera efectiva su control y erradicación. Existen remedios caseros que pueden ayudarnos a controlar y detener el ataque de ácaros y pulgones y también la temible mosca blanca, para ello podemos preparar una solución de ajo y cebolla y rociar por 5 días continuos a nuestra planta.
Para ellos solo debe tomar entre 5 y 8 dientes de ajos y media cebolla, machacarlas y agregarlas a un litro de agua, luego dejar reposar por 24 horas y al día siguiente, coloque a fuego lento la mezcla, deje hervir por espacio de 15 minutos y luego permita enfriar. Cuando la solución se encuentre a temperatura ambiente, entonces puede rociar con ella a la planta. También simplemente puede acercarse a las tiendas especializadas en el ramo y solicitar un insecticida específico para el tipo de plaga, ellos le darán asesoría en cuento a su aplicación y cuál es el mejor producto a utilizar.
Si notamos manchas en el envés de las hojas del espatifilo, podemos estar en presencia de la conocida cochinilla algodonosa. Estos son pequeños insectos difíciles de identificar a simple vista por lo pequeño de su tamaño, pero si notamos un color blanco algodonoso en las hojas de la planta, sin lugar a dudas estamos en presencia de cochinillas. Podemos utilizar un método mecánico para quitar a las cochinillas, es decir, arrancarlas de las hojas con un paño humedecido en alcohol.
También podemos lavar las hojas con agua y jabón neutro, debemos frotar delicadamente para retirar a las cochinillas, sin hacerle daño a la planta. Luego se debe retirar con abundante agua el exceso de jabón. Si observamos hojas con pequeñas manchas amarillo-castaña y luego se enroscan tomando una forma de barquilla, podemos estar en presencia de un acaro llamado araña roja el cual es muy dañino. Se desarrolla en la mayoría de los casos cuando los niveles de humedad de nuestra planta se encuentran muy por debajo de lo necesario, podemos también eliminar su presencia utilizando un paño que nos permita remover el parásito.
Como siempre señalamos lo mejor que podemos hacer es evitar la aparición de plagas y enfermedades, es por ello, que siempre hacemos énfasis en el realizar un riego adecuado, para evitar generar ambientes muy húmedos o muy secos que favorezcan la aparición de estos indeseables animalitos.
La revisión frecuente de nuestros ejemplares nos ayudará a identificarlos a tiempos y poder evitar que el ataque conlleve a la muerte de nuestra planta. Al momento de identificarlos y detener el ataque, debemos corregir la acción que promovió su presencia. Las enfermedades generalmente son provocadas por la presencia de hongos, así que realizar un tratamiento preventivo en el sustrato es lo más recomendable.
Consejos
Bien ya finalizando vamos a recomendarles ciertas acciones que pueden ayudar a mantener su espatifilo saludable por mucho tiempo, uno de los primeros consejos que podemos decirles es la necesidad de mantener siempre limpias las hojas del espatifilo, debido a que es una planta de interiores, lo más probable es que se acumule sobre sus hojas el polvo doméstico, lo que va a interferir en su proceso de respiración, es por ello que se deben mantener limpias, de lo contrario se taparan los estomas, que son esas células ubicadas en la epidermis de la planta que permiten el intercambio de gases.
Simplemente debemos utilizar un paño humedecido con agua y limpiar delicadamente. No recomendamos el uso de sustancias para hacer más brillantes sus hojas, debido a que estas pueden actuar también de forma negativa sobre los estomas. Otro de los consejos que debemos dejarles es la elección del lugar en donde estará su espatifilo, deben recordar que el mismo debe ser muy iluminado, que no se produzcan corrientes de aire, para que el espatifilo se desarrolle favorablemente.
Recordemos que nuestra planta así se encuentre en una maceta va a continuar creciendo, por lo tanto, el proceso de trasplante de la planta debe ser periódico. Cómo saber cuando tenemos que trasplantar nuestro espatifilo a una maceta más grande, simplemente cuando comencemos a notar que las flores son más pequeñas, las puntas de las hojas se secan o la coloración de las hojas no es de un verde intenso, son síntomas que nos avisan de la necesidad de trasplantar al espatifilo a una maceta más grande.
Por último, recuerde que lo importante no es eliminar los parásitos y enfermedades de nuestra planta, lo importante realmente es evitar su aparición, para ello debemos estar atentos a las condiciones del microambiente en el que se desarrolla nuestro espatifilo y las señales que nos da nuestra propia planta.
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