La violeta africana una hermosa planta que hoy podrá conocer en detalle, acompáñenos a descubrir toda la información de la Violeta africana, cuáles son sus características, cuál es origen, como cultivarla, como prevenir enfermedades, daremos consejos para su cuidado y mucho más!
Indice de contenido
Características de la Violeta africana
La violeta africana es reconocida como una de las plantas más llamativas por sus hermosas flores de colores, por lo que son muy populares como especie utilizada en la decoración de interiores. Su nombre científico es Saintpaulia sp, de este género se encuentran identificadas al menos seis especies diferentes y pertenecen a la familia de las Gesneriaceae. Se trata de pequeñas hierbas perennes, que muestran hojas gruesas pubescentes y flores vistosas.
Son plantas muy vistosas y dependiendo de la especie mostraran sus flores un tipo de coloración, es así que podemos reconocer como de las más comunes, las que tienen flores de color morado intenso o violeta de allí su nombre, también las hay de color rosado, blancas, azules, entre otras.
Las hojas de la violeta africana tienen una suave pubescencia, confiriéndole a las hojas las cuales son de color verde intenso, una textura aterciopelada. A pesar de ser pequeñas en tamaño, la violeta africana muy difícilmente pase desapercibida, porque la vistosidad de sus flores son realmente hermosa.
La violeta africana es una planta de crecimiento horizontal, así que no esperemos que se desarrolle de forma vertical, porque solo logrará alcanzar en el mejor de los casos unos escasos 12 centímetros como altura máxima.
Por el contrario su crecimiento horizontal puede llegar a tener una envergadura de por lo menos 30 centímetros de ancho, así que le recomendamos ubicarla en lugar, que le permita su desarrollo horizontal. La forma de las hojas es redondeada, en algunas especies pueden llegar a presentar hojas de forma ovalada, se encuentran sujetas por un largo pecíolo y son de textura carnosa.
Las flores por su parte se desarrollan en grupos de mínimo tres flores, las cuales se encuentran sostenidas por pedúnculos, que surgen desde la base de la planta y que permiten que se ubiquen por encima de las hojas. La característica más notable de la violeta africana adicional al hermoso color de sus flores, es ese aspecto aterciopelado que presentan sus hojas y sus flores, lo que le confiere a esta planta un aspecto de distinción, que sin lugar a dudas resalta en cualquier lugar en el que se encuentre.
Origen
Comentaremos ahora sobre el origen de la violeta africana, tal como podemos presumir por su nombre es originaria del continente africano, específicamente la violeta africana proviene de las zonas más altas del este de África oriental. Fue Walter von Saint Paul-Illaire, un barón de origen alemán, a quien se le atribuye el hallazgo de la especie.
Como vemos es un error pensar que porque las violetas se desarrollan o naturalizaron en Europa son oriundas de ese continente, por lo que podemos deducir que su presencia en el continente europeo, es consecuencia de los diferentes viajes de exploración y colonización que se realizaron, desde el viejo conteniente. Se estima que la violeta africana se expandió fuera del territorio africano en el siglo XIX.
No podemos dejar de comentar la relación del nombre científico y su relación con la persona que transportó desde su lugar de origen hacia Europa a la violeta africana. Como recordaremos anteriormente señalamos que el nombre científico de la especio que ocupa nuestra atención el día de hoy es Saintpaulia y quien realiza el hallazgo es Walter Von Saint Paul.
Era un barón alemán como acabamos de indicar, que era realmente botánico y tenía un hacienda en la que cultivaba caucho. Walter Von Saint Paul siempre sintió inquietud por conocer lo más posible de la flora y de la fauna y por ello es reconocido como uno de los personajes que aportó mucho al conocimiento.
Su hallazgo lo realizó en el año 1.892 específicamente en las montañas de Usambara en Tanzania, para la época en la que estamos hablando era llamada África Alemana del Este. Por ello, la especie de violeta africana fue llamada Saint Paulia, a la especie de flores morado intenso se nombró ionantha que al traducir significa parecido al violeta.
La descripción referida por el barón es que esta hermosa planta fue encontrada en los espacios que se generaban entre las rocas de la montaña, los cuales eran sombreados y además eran húmedos, porque bajaban corrientes de agua de la parte alta de la montaña.
Existe asociado a la violeta africana una hermosa leyenda, se trata de una leyenda iroqués, los cuales eran unos nativos americanos. Dice la leyenda que un valiente guerrero en medio de sus hazañas conoció una mujer, de la cual se enamoró de manera inmediata, era una mujer de belleza extraordinaria.
Esta hermosa mujer era de una tribu rival y por ello no podía, ni quería saber de ese valiente guerrero, cuando se enteró que ella lo rechazaba, decidió alejarse de todo tipo de luchas y contiendas y se dedicó a cantar su amor y en sus canciones contaba de todos los atributos de aquella hermosa mujer de quien se había enamorado.
Era tanto el amor y clamor del guerrero que hasta las aves sintieron compasión y llevaron en su cantar, el canto del guerrero hasta la tribu rival. Al escuchar a las aves la mujer entendió del gran amor que él le tenía y huyó a su encuentro.
Pero esta decisión trajo consecuencias y los hombres de la tribu rival salieron en busca de la pareja y los asesinaron a los dos, donde cayeron los cuerpos nacieron unas plantas, cuyas hojas tenían forma de corazón y sus flores eran de vibrante color. Por ello la violeta africana es reconocida como símbolo de amor y utilizada en el feng shui para sanar las afecciones del alma.
Es posible que esos lugares remotos en donde se encontró la violeta africana y la belleza de la planta, hayan servido de inspiración para crear esta hermosa leyenda, en donde la forma acorazonada de sus hojas, lo aterciopelado de su textura y la belleza de sus flores, se encuentran hermosamente reflejado en la fuerza y valentía del guerrero, el amor que surgió en ambos, lo sutil y breve del encuentro y la belleza sin igual de la mujer.
Cultivo de la Violeta africana
Ahora vamos a comentar toda la información que necesitan saber sobre el cultivo de la violeta africana es una planta maravillosa, que nos brinda diferentes opciones para desarrollar su cultivo. Podemos realizar el cultivo de la violeta africana utilizando semillas de la planta, las cuales podemos comprar en las tiendas dedicadas al ramo de la floricultura o también podemos obtener las semillas de la misma planta.
También la violeta africana puede ser cultivada de forma vegetativa, es decir, a partir de una parte de la planta, puede ser una hoja. La violeta africana se desarrolla de manera satisfactoria en macetas, incluso son más exitosos los cultivos que cuando la planta se cultiva directamente en la tierra de nuestro jardín.
Lo más recomendable si decide iniciar el cultivo de violeta africana utilizando semillas, es que usted compre las mismas en un vivero o agrotienda especializadas, esta recomendación la fundamentamos en el hecho de que el tamaño de las semillas de la violeta africana es realmente pequeño, haciendo la recolección de las mismas algo realmente complicado.
Lo que debe realizar es prepara el sustrato en donde colocará las semillas de violeta africana, tapar superficialmente, humedecer el suelo y esperar que germine, siempre atento a mantener la humedad necesaria. Una vez que la planta se encuentra arraigada en la maceta, podemos realizar el trasplante de la misma si no se encuentra en el lugar definitivo. Se debe tener mucho cuidado de no dañar la planta al momento de trasplantarla, recuerde que se trata de una planta frágil.
Como ya mencionamos la violeta africana se cultiva generalmente para ser una planta de interiores, en la que se utilizan comúnmente la especie S. ionantha. Es tan hermosa que actualmente se están realizando hibridaciones para crear nuevos cultivos y ampliar la oferta de violeta africana en el mercado. A pesar de la sutiliza de la planta es reconocida como una especie de extraordinaria dureza, la cual con los cuidados adecuados es capaz de entregarnos la belleza de sus flores los doce meses del año.
La propagación de la violeta africana de forma vegetativa es una de las opciones más utilizadas, porque es más sencillo y aumenta las probabilidades de éxito. Este tipo de multiplicación se puede realizar seleccionando a los hijos de las plantas madres o de origen y también eligiendo estacas de las hojas.
Para ello, se selecciona el pecíolo de una hoja y tiene 2 opciones, colocarlo en un recipiente con agua para permitir se desarrolle la raíz o colocarla directamente en la tierra húmeda. En ambos casos debe esperar un periodo de unas dos o tres semanas, manteniendo las condiciones de humedad y verá como se genera una nueva planta.
También se puede realizar la reproducción por hojas de la violeta africana, esta es otra manera muy sencilla de obtener un nuevo individuo de violeta africana. Para ello, debe seleccionar las hojas más jóvenes de la planta madre y colocarla directamente en el sustrato preparado para su reproducción. Podemos crear un mini invernadero colocando sobre la maceta un recipiente de plástico, ubicamos en un área sombreada, mantenemos la humedad de la tierra y esperamos su desarrollo.
Para aquellos que están pensando realizar el cultivo de violeta africana de una manera extensiva, se le recomienda la propagación in vitro, claro esto es ya un poco más avanzado en cuanto a requerimientos de materiales y condiciones controladas, pero la reproducción de la planta será en grandes cantidades.
Para realizar este tipo de cultivo, las hojas seleccionadas debe ser lavadas en una solución jabonosa, luego de ello deben ser enjuagadas con agua destilada, el propósito de este tratamiento previo es lograr la desinfección de la parte de la planta a ser utilizada en la propagación, debido a que el sustrato en el que será colocado es enriquecido y puede promover el crecimiento de patógenos que se encuentren en ella.
Luego del tratamiento las mismas se deben colocar en un envase de vidrio con solución de auxina, la cual es una hormona de crecimiento, se tapa con una servilleta de papel y se deja en la sombra, por al menos 20 días. Verán como a las hojas se les empieza a formar una callosidad y desde ellas comenzarán a salir raíces, se debe esperar que estas se desarrollen lo suficiente para ser colocadas en las macetas en donde continuaran su desarrollo.
La ventaja de este tipo de propagación es el porcentaje de éxito que se tiene, por ello solo se recomienda esta técnica si usted va emprender un cultivo extensivo de la especie. Si no es el caso entonces recomendamos el procedimiento tradicional de propagación.
Plantación
Luego de haber enraizado las plantas que vamos a reproducir, viene el proceso de realizar la plantación de la violeta africana, para ello se debe preparar el sustrato en el cual vamos a continuar permitiendo el desarrollo de las plantas. El sustrato ideal para las violetas africanas debe tener un pH ligeramente ácido, un sustrato suelto y con buen drenaje. Para ello debemos preparar compost, perlita y vermiculita en partes iguales.
Si no deseamos complicarnos mucho, es oportuno informar que el tipo de sustrato ideal para violeta africana puede ser comprado ya listo en los viveros. Luego de contar con el sustrato listo debemos seleccionar la maceta en la que vamos a colocar a nuestras plántulas, recordemos que estas son plantas que crecen horizontalmente, por lo que debemos seleccionar macetas anchas que permitan el desarrollo radicular de la planta.
En realidad el material de la misma no es importante, así que pueden elegir macetas de plástico o de terracota, se deben colocar las plántulas dejando un espacio entre cada una de ellas, si va a realizar el desarrollo de las plantas en una misma maceta. El suelo o sustrato colocado en la maceta debe permanecer suelto, no lo vaya a compactar.
Realice la apertura o perforación de un hoyo de un centímetro aproximadamente y en él va a colocar la plántula, se dejan las hojas por encima de la superficie de la tierra, humedezca y deje crecer. Cuando la planta alcance un tamaño de más de 5 centímetros, puede trasplantarlas a la maceta definitiva si las tenía juntas en una misma maceta. Recuerde tratarlas con mucha delicadeza.
Iluminación y temperatura
La luz y a temperatura son factores determinantes para mantener y desarrollar a nuestras plantas de violeta africana, no podemos olvidar que los individuos originales fueron hallados en las hendiduras de las rocas, en donde estaban protegidas del sol y además el agua que corría desde la zonas altas de la montaña, permitía mantener un ambiente húmedo.
Este tipo de condiciones naturales en las que se desarrollaron las violetas africanas de manera silvestre, deben ser medianamente reproducidas, en nuestros hogares y jardines, para que la memoria genética de nuestras plantas se active y se desarrolle satisfactoriamente. Es así que si tenemos a nuestra violeta africana dentro de nuestra casa, debe estar ubicada en un sitio en donde pueda recibir la iluminación de manera adecuada, para ello debe recibir luz de manera indirecta, ya que debe estar en sitios sombreados.
Si por el contrario se encuentra en nuestro jardín, debemos evitar colocarla o sembrarla en lugares en donde reciba directamente los rayos del sol. En referencia a las temperaturas, la violeta africana se adapta bien a las temperaturas cálidas y aire fresco, si la violeta se encuentra dentro de nuestra casa, las temperaturas serán relativamente estables y cálidas mayormente, por lo tanto, el factor a controlar sería la iluminación.
Por el contrario si se encuentra en el exterior ubicada a cielo abierto, debemos controlar ambos factores, la iluminación y la temperatura. Si nos encontramos en países en donde se presentan bajas temperaturas debemos estar atentos a proteger a las violetas que se encuentran en el exterior a cielo abierto, por ello se recomienda que estén plantadas en macetas, para poder tener la facilidad de colocarlas en lugares más cálidos, mientras pasa el invierno.
Riego
Generalmente la regla de oro para el riego de nuestras plantas es siempre tocar el sustrato, si el mismo se encuentra húmedo, lo recomendable es simplemente postergar el riego de nuestra planta, sin embargo, la mayoría de las personas prefieren establecerse cronogramas de riego.
Para ello se debe tomar encuentra el tipo de clima en el que nos encontramos, así como la estación del año. En los climas cálidos, las violetas africanas son especialmente vulnerables a la podredumbre de los pecíolos de las hojas, sin embargo, esto se debe más que a la cantidad de riego a la forma en cómo se realiza el riego.
La violeta africana debe ser regada directamente en el sustrato y evitar a toda costa, que se humedezcan sus hojas y sus flores, se debe procurar mantener siempre seco el follaje. Una de las maneras que puede ser regada la violeta africana es utilizando platos de macetas, se coloca el agua en el plato y la planta absorberá de este evitando así humedecer las hojas y flores, al momento del riego.
El riego debe realizarse de tal manera que el suelo se encuentre siempre homogéneamente humedecido, evitando la saturación. Una manera de identificar que el riego no se está realizando de manera adecuada, es cuando se comienzan a observar señales de marchitamiento en la violeta africana. Por su parte cuando se realiza un exceso de riego, podemos promover la enfermedad de podredumbre.
La temperatura del agua de riego si toca el follaje también puede generar el desarrollo de manchas en las hojas, las cuales son llamadas círculos cloróticos. Se recomienda para evitar estas afecciones a las plantas mantener el agua de riego al menos 8 grados centígrados por encima o por debajo de la temperatura ambiental.
Enfermedades y parásitos
Lo mejor que podemos hacer para mantener sanas a nuestra violeta africana es evitar que se desarrollen enfermedades y que sea atacada por plagas, para ello debemos estar muy atentos a las condiciones del microclima en el que se está desarrollando nuestra planta. Una de las prácticas que pueden disminuir la incidencia de enfermedades es chequear la humedad del sustrato, verificar que no esté recibiendo directamente los rayos del sol, que la temperatura sea la adecuada, entre otros parámetros de interés.
Con ello evitamos crear ambientes que promuevan la generación de condiciones que permiten el establecimiento de plagas y el desarrollo de enfermedades. Es así que debemos también estar atentos a que nuestra violeta africana se mantenga limpia, con esto queremos decir, que es necesario eliminar las hojas y flores que se marchitan, dañan o mueren, ya que estas partes pueden ser utilizadas por las plagas para establecerse y atacar a la planta.
En conocimiento de lo que podemos hacer para prevenir enfermedades y parásitos, es muy importante que podamos entonces conocer a cuáles enfermedades y plagas son susceptibles esta especie, como podemos identificarlas y cómo podemos controlarlas y erradicarlas de nuestra violeta africana. Uno de los insectos más conocidos que ataca a la violeta africana es el mealybugs, mejor conocida como la cochinilla, este insecto es identificado más que por su anatomía, podemos reconocerlo como manchas blancas.
Se trata de un perforador y succionador de savia, por lo que es una plaga sumamente dañina. Como ya sabemos la violeta africana es una planta realmente delicada, por lo que el ataque de una plaga puede ser mortal. El ciclo de vida de este insecto puede estar presente en todos sus estadios en la planta, por lo que si no la identificamos a tiempo el daño puede llegar hacer irreversible, ya que podemos tener una planta individuos adultos, ninfas, huevos de este insecto.
Los mismos generalmente se ubican en el envés de las hojas, en los pecíolos y el tallo de la violeta africana. Uno de los tratamientos que podemos realizar es la vaporización con agua tibia, eliminando por supuesto el exceso de agua de las hojas, para evitar el desarrollo de círculos cloróticos. También puede ser utilizado un insecticida sintético para eliminar la plaga.
En muchas oportunidades se recomienda un tratamiento antiséptico preventivo, por lo que se utilizan fungicidas, antes que el hongo vaya a atacar a la planta, porque una de las enfermedades más dañinas, son las producidas por hongos. La enfermedad conocida como la roya, es provocada por la presencia de un hongo, podemos reconocerla por las lesiones que se presentan en las hojas de la violeta, la cual con el tiempo se torna de color marrón.
Lo más recomendable es separar al individuo enfermo de los individuos sanos y atacar la enfermedad con un fungicida. El mantenimiento de la planta, la limpieza del entorno, el control de la humedad, son factores importantes para evitar el ataque de plagas y enfermedades. Solo nombramos dos de las más peligrosas, pero la violeta africana puede ser atacada por nematodos, trips, ácaros, entre otros insectos.
Consejos
A continuación daremos algunos consejos que los ayudaran a mantener a su violeta africana hermosa y sana, lo primero es que debemos estar muy atentos de la iluminación, no podemos olvidar que se trata de una planta muy susceptible a los rayos de sol directo, pero no podemos mantenerla en la oscuridad ambos extremos son dañinos para la planta.
Por lo antes dicho, debemos procurar un espacio en donde la violeta reciba una alta cantidad de luz indirecta, por ello colocarla cercana a una ventana es una buena decisión. Las corrientes de aire tampoco son buenas para la violeta, por lo que si se mantiene de manera permanente abierta la ventana porque la misma es utilizada para mejorar la aireación del espacio, debemos elegir otro lugar.
La violeta africana es una planta que se desarrolla muy bien en temperaturas entre una rango de 15 grados centígrados a 21 grados centígrados. La humedad es de suma importancia pero debe ser controlada, ya que el exceso es dañino, por ello, siempre es recomendable tocar el sustrato antes de regar. Se recomienda realizar un abonado al momento de la plantación o trasplante para ayudar a la floración de la violeta. Generalmente se recomienda el uso de Nitrógeno, Fósforo y Potasio en una relación 20-20-20.
Como hemos podido apreciar a lo largo del artículo la violeta africana es una hermosa planta herbácea, cuyos cuidados no son tan exigentes, por lo que puede ser perfectamente seleccionada como una de las especies para decorar el interior de nuestros hogares. También es una hermosa planta que puede ser obsequiada y será recibida sin contratiempos, porque se trata de una planta fácil de cuidar.
Es una planta relacionada con el amor, la buena energía y por ello es usualmente utilizada en las decoraciones de bodas y otras tradiciones en las que se desean buenos augurios, porque la violeta africana se reconoce como un planta que atrae la prosperidad y la paz, por lo que no hay razón para no tener violetas africanas en sus hogares.
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