Mammillaria, un cactus de sencillo cultivo y hermosas flores

Descubra toda lo que necesita saber sobre la Mammillaria un hermoso cactus de vistosas flores, en este artículo conocerá sobre sus características, su cultivo, cuáles son las condiciones para que se desarrolle y se mantenga sin enfermedades, cómo debe regarlo y mucho más.

MAMMILLARIA

Características del Mammillaria

El género Mammillaria, está conformado por más de 350 especies, se caracterizan por tener una bella forma redondeada,  globosa o cilíndrica que los hace muy atractivos. Son unos cactus que tienen un floración que puede cautivar por sus forma, distribución y colores.

El género Mammillaria no presenta ramas en realidad son pencas cilíndricas, fibrosas, donde en la superficie de las mismas se pueden observar tubérculos que parecen formar una estrella y en cada uno de ellos hay areolas rodeadas de espinas, las cuales pueden ser sedosas o consistentes todo dependerá de la especie de Mammillaria.

En realidad estas espinas son las hojas modificadas, especial característica de la familia Cactaceae, a la cual pertenece la Mammillaria, esta adaptación evolutiva es lo que ha permitido que estas plantas puedan vivir en ambientes totalmente inhóspitos para otras plantas.

Las flores pueden presentarse en diferentes tamaños que varían desde diminutas florecitas hasta un tamaño mediano, pero siempre vistosas, las mismas nacen en el medio de los tubérculos, como señalamos las flores se caracterizan por tener colores muy llamativos los cuales van a depender de la especie. Los frutos son realmente pequeños pueden ser de color blanco, verde o rojo, se trata de diminutas bayas que resguarda las semillas de la Mammillaria que suelen ser de color negro o marrón.

MAMMILLARIA

Flores

Dentro de las características que más llaman la atención de esta especie es que de su aspecto visualmente hermoso pero un poco agresivo por la presencia de sus espinas que no invitan a tocarlo, surgen unas flores realmente vistosas y muy llamativas. Las mismas generalmente se encuentran distribuidas en un anillo formando una corona, esta disposición y ubicación se repite en cada floración. Las flores según la especie de Mammillaria son de una tonalidad específica en las que podemos disfrutar de flores amarillas, rojas, rosadas, blancas, entre otras.

En la mayoría de los casos solo nos conformamos con que las especies de plantas tengan hermosas, vistosas y aromáticas flores y nos olvidamos la importancia de la presencia de las flores, para el mantenimiento de la especie. En Mammillaria la permanencia y la tendencia evolutiva de la especie depende de diversos factores de la biología floral, entre los que podemos nombrar el sistema de cruzamiento, en el que existen tres tipos principales el  autocruza, el entrecruza y el mixto.

Con respecto a los sistemas de apareamiento se identifica la importancia de un cociente de relación entre el polen y óvulo. Dentro de los estudios que se han realizado para conocer más sobre la biología floral de Mammillaria se dice que prevalece la autogamia cuando la densidad poblacional es baja. En los atributos que se reconocen para tener un sistema reproductivo eficiente se encuentra la producción de néctar para atraer a los insectos polinizadores.

Las flores de Mammillaria son hermafroditas, es decir, presentan ambos aparatos reproductivos femenino y masculino en una misma flor, tienen forma de copa, son homógamas lo que significa que se reproducen dentro de un mismo grupo, esta es la manera de garantizar se perpetúen sus características específicas, las cuales no son compartidas con el resto de individuos de la especie.

Origen

Se tiene como lugar de origen del género Mammillaria a México y el sureste de los Estados Unidos, la especie fue descrita por  Carolus Linnæus un naturalista, botánico y zoólogo sueco, quien da el nombre de Cactus Mammillaria en el año 1.753. Es un género que se encuentra en regiones con climas desérticos por lo que pueden ser encontrados naturalizados en varias partes del mundo.

Existen especies de Mammillaria que son endémicas de algunas regiones de México, a pesar que las condiciones climáticas se presentan en otras regiones y partes del mundo, estas especies solo pueden desarrollarse y crecer en regiones particulares de ese país.

Una de las especies endémicas se conoce con el nombre científico de Mammillaria mathildae, lamentablemente su condición de especie endémica y la destrucción de su hábitat, mantiene en la actualidad a esta planta en peligro de extinción. Es de suma importancia la identificación y el conocimiento del género Mammillaria para lograr avances en identificar las medidas necesarias para protegerla.

Es una especie utilizada como una planta ornamental que al día de hoy se encuentra distribuida en muchas zonas costeras e islas del Caribe. Venezuela es uno de los países en los que se encuentra el género Mammillaria de forma silvestre.

MAMMILLARIA

Cultivo del Mammillaria

Estamos convencidos que la belleza del género Mammillaria lo mantiene cautivado, pues tenemos  una excelente noticia, este género es muy fácil de cultivar y cuidar. Una de las maneras más sencillas de iniciar un cultivo de Mammillaria es adquirir una en un vivero y a partir de ella, comenzar a reproducirla.

Otra manera es obtener desde un individuo adulto y saludable de Mammillaria una de las pencas o brotes que se forman en los laterales de la planta madre, esas pencas pueden ser retiradas con mucho cuidado, primero de no maltratar a la planta madre y segundo extraer la penca de manera segura y sin hacernos daño con las espinas.

A partir de la penca vamos a obtener un individuo independiente de Mammillaria. Para asegurar que nuestra planta se recupere de la extracción, se debe colocar en una zona a medio sol, para permitir la cicatrización, se recuperan rápido así que al día siguiente ya la puede colocar en el lugar definitivo.

Con respecto al cultivo de Mammillaria utilizando semillas, es un cultivo sencillo, las semillas podemos obtenerlas de los frutos de un cactus maduro o simplemente podemos adquirirlas en tiendas del ramo. Al obtener nuestras semillas si las mismas las obtuvimos de un fruto, debemos permitir que se sequen, para ello se debe tener mucho cuidado de no perderlas ya que son realmente diminutas.

Debemos tratar de crear un pequeño invernadero para sembrar nuestras semillas, ya que en esta fase necesitan de humedad y luz, para ello podemos utilizar los envase para transportar comidas empacadas que son de plástico transparente, esto con la idea de reutilizar y no generar basura. Preparamos un sustrato con suelo orgánico, arena y aserrín, para que el mismo sea bien drenado, nutritivo, suelo y permita el enraizamiento de las semillas.

Con la finalidad de evitar el desarrollo de hongos y generar un ambiente desinfectado para que nuestras semillas se desarrollen, vamos a agregar al sustrato agua caliente, esto ayudará a eliminar patógenos. Al enfriarse nuestro sustrato lo colocamos en el recipiente al cual previamente le abrimos en la base unos agujeros para que no se encharque el suelo cuando lo reguemos y listo colocamos nuestro sustrato en él y colocamos nuestras semillas.

Cerramos la tapa transparente y colocamos nuestro mini invernadero en un lugar en donde reciba los rayos del sol, ya solo no queda esperar  que comiencen a enraizarse, para que puedan ser trasplantadas al lugar definitivo.

Es importante tener en cuenta a la hora de cultivar Mammillaria que es una especie que se desarrolla en clima cálidos, por lo tanto, el lugar definitivo debe permitir que la planta reciba los rayos de sol una buena parte del día. Los suelos deben ser bien drenados ya que no toleran las sobresaturaciones de agua. A pesar de no ser exigentes con la calidad del sustrato, nuestras plantas pueden recibir abono, esto permitirá una hermosa floración.

Multiplicación

Las Mammillarias podemos multiplicarlas utilizando para ello los brotes basales de plantas adultas y también utilizando las semillas, debemos tener bien claro que si deseamos multiplicar un ejemplar idéntico a la planta madre, la mejor decisión que podemos tomar es realizar la multiplicación utilizando brotes basales, debido a que si utilizamos las semillas, tenemos un porcentaje de variabilidad, debido a que actuará de manera natural la variabilidad genética.

Luego de decidir lo que deseamos pues nada, solo nos queda obtener el material para realizar la multiplicación de la Mammillaria, sea brote o sea semilla. Si se van a utilizar los brotes debemos seleccionar nuestra planta madre y revisar la presencia de los mismos en la base de la Mammillaria, para separarlos de la planta madre debemos utilizar un cuchillo el cual debe estar desinfectado, para evitar infectarlo con hongos o bacterias

Los brotes basales en la mayoría de los casos pueden ser retirados con raíces, al tener los mismos deben ser trasplantados de manera inmediata. Luego de sembrado no los regaremos hasta que pasen por lo menos 3 semanas, porque no deseamos que a los mismos se le pudran las raíces. Si el brote que estamos quitando de la planta madre no trae raíces debemos permitirle que se cicatrice, posteriormente podemos trasplantarlo. Si decidimos utilizar semillas realizamos el mismo procedimiento descrito para su cultivo.

Iluminación y temperatura

Como hemos indicado la Mammillaria es un especie de climas cálidos y desérticos, por lo que se trata de un planta capaz de tolerar altas temperaturas y mucha iluminación durante el día, pero también es una planta que soporta las bajas temperaturas que se producen en las zonas desérticas. Estas son condiciones climáticas que no son toleradas por todas las plantas.

MAMMILLARIA

Este género evolucionó para poder vivir en este tipo de ambientes con temperaturas extremas, por ello modifico sus hojas en espinas. Con respecto a la iluminación la Mammillaria siempre debe recibir luz solar, en caso de que su planta sea ornamenta de interiores, debe estar en un lugar muy iluminado, no obstante, es recomendable que reciba en algún momento del día los rayos del sol de manera directa.

Riego

La Mammillaria es una especie que tiene poca capacidad para soportar suelos húmedos por largos periodos de tiempo, por ello es un error muy común regar a las Mammillarias como si se tratará de una planta de sombra, porque las usan como planta de interiores. Es importante comprender que las Mammillarias son planta de sol y no toleran la sobresaturación de agua en los suelos, por lo que solo debemos aplicar el riego cuando el suelo esté verdaderamente seco.

Una manera de que nuestro riego sea efectivo y realmente ayude a nuestra planta, es manejar dos variables, humedad del suelo y temperatura ambiental, por lo tanto, si hay altas temperaturas y nuestro suelo está bien drenado el riego será con más frecuencia, que si hay bajas temperaturas y suelos húmedos. De esta manera podemos identificar la frecuencia y necesidad de riego sin estar sujeto a los cambios estacionales.

Enfermedades y parásitos

Las Mammillarias son plantas realmente resistentes al ataque de enfermedades y parásitos, la mayoría de los casos cuando este tipo de planta presenta un síntoma de deterioro, se debe a los cuidados erróneos que se han realizado o malas prácticas  de cultivo. Por lo tanto, más que enfermedades nuestras Mammillarias se enferman por recibir poca luz del sol, por lo que comienzan a tomar una coloración verde clara y en oportunidades dejan de florecer.

Otra característica que puede presentar la Mammillaria es como pérdida de turgencia y decoloración, lo cual se debe a largos periodos de deshidratación. Si bien las Mammillarias son resistentes a periodos de sequía en su ambiente natural, no es saludable cuando es cultivada que olvidemos regarla, porque no tienen oportunidad de obtener agua ni del rocío de la noche, mucho menos si se encuentra dentro de nuestra casa.

Cuando comenzamos a notar manchas pardas en nuestra Mammillaria es que la tenemos expuestas a muy bajas temperaturas. Si comienzan a notar que las Mammillaria se ponen blandas, pierden turgencia y se arrugan, es porque estamos regando en exceso.

Existe un parásito con el que se debe tener especial atención y es la cochinilla, este insecto se alimenta de la savia de las planta y Mammillaria no es la excepción. Si comenzamos a notar que nuestra planta muestra síntomas de debilitamiento, es posible que este siendo atacada por la cochinilla. Podemos salvar nuestras Mammillaria sacándola de la maceta y lavándola con agua tibia, eliminar todas las raíces que se encuentren infectadas y luego replantar en una maceta con un nuevo sustrato.

Esperamos que haya quedado cautivado con este hermosa especie de cactus la Mammillaria, una planta de hermosas flores y poco mantenimiento. Si este artículo ha sido de su agrado le invitamos a continuar la lectura de los enlaces que le recomendamos a continuación:

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