Calathea una hermosa planta tropical de la que podrá conocer al leer este artículo, aprenderá de sus características, lugar de origen, tipo de cultivo, cuáles son las enfermedades que pueden afectara, consejos y mucho más!
Indice de contenido
Características de la Calathea
Hoy nos reúne en este blog el género Calathea una hermosa y llamativa planta tropical de la que se reconocen más de 100 especies. El colorido de sus hojas, el patrón y disposición de los mismos hacen de la Calathea una de las plantas preferidas para decorar en interiores. La cantidad de especie aporta diversidad no solo en el mundo vegetal, sino diversidad de colores, cada una de las especies presenta particularidades que la hacen ser muy atractivas.
Esta planta es realmente llamativa por el tamaño de sus hojas, su color y los patrones que presentan cada una de las especies, lo que hace muy difícil señalara cual es la más bonita, cada persona tendrá y seleccionara su preferida, en los personal todas me parecen realmente hermosas. Una de las más solicitadas es la Calathea rufibarba, se trata de una de las Calathea de mayor envergadura, esta especie puede llegar a desarrollar más de un metro de altura, sus hojas son extraordinariamente grandes.
Se caracterizan por presentar finos tallos y sus hijas presentan forma de lanza, es decir, son alargadas, presenta en el envés de la hoja un llamativo color verde morado, mientras que en la parte superior es de color verde oscuro, Estas características las hacen muy atractiva.
Como podemos notar esta planta es realmente llamativa por sus hojas, no así por sus flores, las cuales se desarrollan en la base de la planta, lo que hace pensar que las mismas nacen desde el sustrato, pero no es así. Las flores no tienen ningún interés decorativo. La Calathea es utilizada por algunas comunidades rurales para la elaboración de cesterías y también sus hojas son usadas en la construcción de los techos de las cabañas de la selva.
Origen
Conozcamos un poco sobre el origen de esta hermosa planta, recordemos que este es un dato de suma importancia manejar, debido a que el cultivo y cuidado de la especie, debe estar fundamentado en las condiciones en las que vive de manera natural, lo que nos ayuda a tener éxito al momento de cultivar y cuidar de un ejemplar. La Calathea es originaria de Suramérica, por lo que se trata de una especie de clima tropical, perteneciente a la familia de las Marantaceae.
Se encuentra generalmente asociado a los ecosistemas de selva de Venezuela, Brasil y Perú. El género de la especie fue descrito por Georg Friedrich Wilhelm Meyer, se trata de un botánico alemán, que en sus exploraciones, se encuentra con esta extraordinaria y llamativa especie. El hallazgo de la nueva planta fue publicado en el año 1.818 en el libro Primitiae Florae Essequeboensis, el cual fue escrito por el propio Meyer, para dar clases de botánica.
La calathea forma parte de las especies que se encuentran en el sotobosque de las selvas tropicales, de las características que llaman la atención de la misma, es definitivamente su follaje, por lo que es identificada como una planta para decorar espacios interiores.
Se trata de una especie siempreverde, es decir, que mantiene sus hojas durante todo el año, presentan una raíz de tipo rizomatosa desde donde surgen los peciolos que sostienen las hermosas hojas, que dependiendo de las especies pueden variar los patrones y realizar combinaciones entre los colores verdes, gris, amarillo, entre otros.
Cultivo de la Calathea
Conociendo un poco sobre la calathea podemos atrevernos entonces a comentar sobre el cultivo de esta llamativa especie, lo haremos de manera detalla para entregar a ustedes la mejor información posible. No podemos olvidar que se trata de un ser vivo y si decidimos realizar el cultivo del mismo y tener uno o varios ejemplares en casa, debemos comprometernos con su cuidado, por lo que somos en lo sucesivo cuidadores.
Como ya hemos visto se trata de una especie tropical, que además se encuentra asociada a las especies del sotobosque, con esta información de manera inmediata reconocemos a una especie que se desarrolla en un clima con alta concentración de humedad, temperaturas más o menos constantes durante todo el año, además es una especie de temperaturas cálidas.
Adicionalmente a ello, al ser una especie que se desarrolla en el sotobosque de las selvas tropicales de Suramérica, debemos imaginar que es un especie de sombra y que se desarrolla sobre un sustrato rico en materia orgánica, fibra, permeable y con un pH con tendencia a la acidez. Como podemos observar cuando no vamos de carreras, desde el conocimiento del lugar de origen de la planta, obtenemos información muy valiosa que debemos utilizar para poder cultivar nuestra calathea.
Lo primero que debemos tener presente es que debemos replicar las condiciones naturales, en el lugar en donde vamos a cultivar y mantener a nuestro ejemplar de calathea. Lo principal es el sustrato en el cual se desarrollará nuestra planta, por lo que debemos procurar un suelo para plantas verdes, el cual podemos prepara nosotros mismos, si contamos con los elementos para ello, o simplemente podemos adquirirlo en las tiendas especializadas. Otra información de importancia que debemos manejar es sobre la multiplicación de los individuos de calathea, debido que ello nos permitirá mantener el cultivo en el tiempo.
Para ello podemos utilizar el método de multiplicación vegetativa, es decir, que podemos utilizar parte de la misma planta para obtener un nuevo individuo, si nos encontramos en una región en la que se producen los cambios de clima estacional, se recomienda que la multiplicación de calathea se realice a finales de la primavera y durante la estación de verano.
Para ello, debemos utilizar un ejemplar saludable y fuerte, esta recomendación se fundamenta en la necesidad de aumentar el porcentaje de éxito y multiplicar plantas con información genética de calidad. De esa planta vamos a seleccionar rizomas fuertes, estos rizomas los vamos a dividir, para ello debemos utilizar un cuchillo, no podemos olvidar que las herramientas de jardinerías que vamos a utilizar deben estar limpias y desinfectadas, esto es para minimizar el riesgo de transmisión de enfermedades.
Esta parte que vamos a obtener de la planta madre debe estar conformada por rizomas y hojas, es necesario que desmenucemos el compost que viene adherido de las raíces, lavamos para asegurarnos que no estamos trayendo a nuestro nuevo cultivo, hongos o parásitos. Luego que obtenemos nuestra parte de la planta, la vamos a colocar en un maceta, la cual recomendamos tenga al menos 8 centímetros de diámetro, en la misma vamos a colocar el sustrato previamente preparado o comprado especial para planta verdes, en donde vamos a plantar nuestro individuo.
Sin compactar la tierra fijamos a nuestro pequeño rizoma y vamos a crear un ambiente tipo invernadero, para ello colocaremos una bolsa plástica transparente a la maceta, dejando un espacio entre la bolsa y la planta. Llevamos la maceta a un lugar sin luz y en donde se mantengan temperaturas máximas hasta los 18 grados centígrados y mínimas de 16 grados centígrados.
Dejaremos en ese lugar nuestra pequeña calathea durante una semana, pendiente de mantener siempre un ambiente húmedo, cuando nuestros pequeños individuos comiencen a desarrollar nuevas raíces, es que podemos quitar las bolsas plásticas y permitimos que se sigan desarrollando.
Plantación
Bien cuando nuestro individuos cultivados se han desarrollado, podemos tratarlos como planta adultas, si no se encuentran en su lugar definitivo, entonces debemos realizar el trasplante de la calathea y para ello debemos tener cuidado y hacer las cosas bien, para no perder a nuestro nuevo ejemplar. Recordemos que se trata de un ser vivo y aunque no emitan sonidos, ellos nos harán saber que sufren, así que debemos realizar el trasplante de manera cuidadosa para evitar el sufrimiento de nuestra planta.
Porque hablamos de sufrir, porque al momento de movilizar al individuo estamos interrumpiendo el ciclo vegetativo, estamos generando un cambio y promoviendo una nueva adaptación de la planta y debemos resaltar que particularmente la Calathea, no es una especie que lleve muy bien este tipo de tratamiento.
Como debemos suponer lo primero que debemos procurar es el sustrato para plantas verdes. Luego que sean adultas, llegará el momento en que debamos realizar el trasplante de la calathea, porque con toda seguridad se llenará de raíces el contenedor o maceta en el cual se encuentra y esto interferirá con su desarrollo, así que cuando veamos las raíces sobresalir de la maceta, es el momento de realizar nuevamente el trasplante.
Bien a continuación le daremos las especificaciones para la preparación del sustrato, el mismo de tener al menos un tercio de turba, en caso que no tengan turba pueden sustituir la misma por trozos de madera y hojas, un tercio de tierra fibrosa, la cual debe estar esterilizada, para evitar sembrar a nuestro ejemplar de Calathea en una tierra con patógenos.
Para esterilizar la tierra podemos lavarla con agua hirviendo, de esta manera eliminaremos posibles patógenos. Por ultimo debemos agregar un tercio de arena gruesa o perlita, mezclamos bien y listo nuestro sustrato. Preparamos nuestra maceta agregamos nuestro sustrato y plantamos el individuo de calathea, debemos procurar un ambiente de humedad evitando la sobresaturación de agua, para evitar la propagación de enfermedades y el encharcamiento, el cual la calathea no lleva bien.
Para plantar la calathea repetimos se debe ser muy cuidadoso porque es una planta muy delicada que se estresa con facilidad. Podemos seleccionar una maceta de uno 15 centímetros de profundidad, la cual debe tener agujeros en la parte inferior, para permitir la salida de agua. Vamos a colocar una capa de guijarros o pelitas de arcilla en el fondo de la maceta, con la finalidad de mejorar el drenaje.
Luego tomamos parte del sustrato previamente listo y ya a temperatura ambiente, no vayamos a utilizar el sustrato recién agregada el agua hervida por favor. Llenamos tres cuartas partes de la maceta, colocamos en el centro la calathea, debemos extender sus raíces y agregamos más sustratos para tapar las raíces y fijar nuestra planta. Regamos y la llevamos al lugar seleccionado para nuestra planta, desde donde la veremos crecer y disfrutaremos de su belleza.
Iluminación y temperatura
Este es uno de los parámetros más importantes, porque la iluminación y la temperatura intervienen en el desarrollo de la calathea, más aún cuando estamos tratando con una planta de clima tropical. La calathea como hemos mencionado es una planta de interiores, pero esto no quiere decir que no necesita iluminación, por supuesto que necesita luz, solo que la misma no debe ser recibida de manera directa.
Recordemos que la Calathea es una planta que vive en su estado natural en los sotobosques de la selva tropical de Suramérica, estos espacios del bosque, reciben la luz del sol como si estuviera pasando a través de un tamiz.
Las copas de los arboles sirven de filtro, por lo que los rayos solares llegan al sotobosque con una intensidad disminuida, por lo tanto, debemos procurar un espacio en casa o en nuestra oficina, donde la iluminación tenga más o menos esa intensidad. La calathea se caracteriza por tener hojas muy finas y delicadas, por lo que el sol directo, le provocará grandes daños.
La mayoría de las plantas de interior toleran estar cerca de las ventanas, sin embargo, calathea es más feliz si se encuentra un poco más alejada de ellas. Con respecto a la temperatura volvemos a echar mano de la información de su lugar de origen, recordemos que se trata de una planta que vive en un clima tropical, por lo que debemos entonces suponer que no tolera para nada bien las bajas temperaturas, son plantas de temperaturas cálidas.
Por ello las calatheas se sienten cómodas dentro del hogar o de la oficina porque las temperaturas son más cálidas y constantes, porque tampoco se las lleva bien con los cambios bruscos se temperatura. Una dato importante es que si nuestras calathea se encuentra en la oficina debemos evitar que la misma se encuentre expuesta a la corriente del aire acondicionado.
La calathea no tolera bien las temperaturas por debajo de los 18 grados centígrados y la máxima debe ser hasta 25 grados centígrados. Si logramos mantener estos parámetros, la Calathea se desarrollará perfectamente.
Riego
El riego es otro de los aspectos fundamentales de los cuidados de la Calathea, es una planta que en su estado natural se desarrolla en el sotobosque de la selva, esto es un dato que no podemos pasar por alto, es una información relevante, porque es de imaginar que los niveles de humedad son elevados. Este es un aspecto que llama a la creatividad porque la humedad ambiental es fundamental para el crecimiento de la calathea, si la planta de calathea no tiene la cantidad de humedad necesaria, nos lo hará saber inmediatamente a través de sus hojas.
Uno de los avisos pueden ser que los bordes de las hojas comienzan a mostrar un cambio de coloración, estos empiezan a ponerse de color marrón. Otra de las maneras en que nuestra planta nos puede informar que está por debajo de la humedad necesaria, es que las hojas se entristecen y abarquillan, es decir, los bordes se dan vuelta hacia la parte interior de la hoja.
Este cambio en la forma de la hoja se debe a que la planta busca la manera de evitar la pérdida de agua, por ello resguarda la superficie. Como podemos incrementar los niveles de humedad de nuestra planta existen varias maneras, pero ninguno de ellos tiene que ver con aumentar la frecuencia de riego, porque podemos sobresaturar el sustrato y podemos generar otro tipo de problemas.
Una de las técnicas que podemos utilizar es colocar agua en un plato macetero, pero debemos evitar el contacto directo de la maceta con el agua del plato, porque podemos sobresaturar de agua a la calathea. Para evitar el contacto de la maceta y el agua del plato, podemos colocar piedras para que sirvan como medio de separación. Esta técnica la podemos mantener durante todo el año, pero por supuesto en la época de verano, debemos estar pendientes de reponer el agua, la cual se evaporará más rápido.
Otro método que podemos usar para mantener los niveles de humedad adecuados es la pulverización de agua, pero debemos ser cuidadosos y hacerlo a cierta distancia y preferiblemente con agua de lluvia o agua previamente soleada, debido que el cloro que contiene el agua que llega por los grifos, es my dañina para las calathea, lo que le puede generar cicatrices o marcas poco estéticas.
Manteniendo los niveles de humedad adecuados contribuye con la frecuencia de riego, si bien la calathea nos va a exigir un sustrato húmedo, siempre vamos a recomendar confirmar la necesidad de riego tocando el sustrato, es el grado de humedad del sustrato el que nos va a permitir tomar la decisión de regar o no a la calathea.
Debemos recordar evitar mojar las hojas de la calathea. Como podemos observar debemos lograr encontrar el equilibrio entre el riego y la humedad ambiental, el riego de la calathea debe ser controlado, tomando encuentra incluso la época del año, mientras que humedad deberá ser lo más elevada posible. Si vives en un ambiente seco hay que pulverizar el agua para refrescar. También podemos crear un microclima colocando a nuestra calathea con otras plantas para aumentar los niveles de humedad.
Enfermedades y parásitos
Este es uno de los temas que más llama la atención de los cuidadores, porque prevenir las enfermedades es la condición ideal. Por ello trataremos de dar la información de la manera más detallada posible para que sea de gran ayuda y lo primero que debemos señalar, es que en la mayoría de los casos, cuando nuestra planta de calathea presenta alguna enfermedad o es atacada por una plaga, se debe a que desviamos la atención del cuidado.
Que queremos decir con ello, que si no estamos atentos de mantener las condiciones adecuadas e ideales, para el crecimiento y desarrollo de la calathea, se pueden promover las condiciones idóneas para el desarrollo de enfermedades.
Cuando no estamos atentos a los niveles de humedad de la planta, no realizamos el mantenimiento adecuado, como en este caso específico de la calathea como es retirar las hojas secas o marchitas, es muy posible que estemos promoviendo el desarrollo de enfermedades o el establecimiento de plagas.
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Debemos por lo tanto ser preventivos, mantener nuestra atención en las condiciones microclimáticas en las que se está desarrollando nuestra planta, porque siempre la mejor opción será prevenir las enfermedades. Son varias las plagas que pueden atacar a nuestra planta de calathea, como es la conocida y muy temida cochinilla algodonosa.
Estos son pequeños insectos difíciles de identificar a simple vista porque son diminutos, pero si observamos que las hojas de nuestra planta presentan manchas de un color blanco algodonoso, no lo pongamos en dudas estamos en presencia de cochinillas. Este es un pequeño insecto succionador fitófago que se alimenta de la savia de la planta, por lo que puede afectarla de manera notable a la planta, más aún cuando se trata de una especie tan delicada y sensible como es la calathea.
Para erradicar a este indeseable animal de nuestra planta, podemos utilizar un método totalmente manual, tomamos un paño humedecido en agua y un poco de vinagre y lo pasamos por cada una de las hojas de la calathea, con la suficiente delicadeza de no maltratar las hojas de la calathea, pero con la suficiente presión para arrastrar a la cochinilla.
Otro de los métodos a utilizar es el uso de solución jabonosa, para ello se debe frotar delicadamente las hojas para retirar a las cochinillas, luego se baña a la planta con abundante agua para eliminar el exceso de jabón. Otra de la plagas que se puede hacer presente en nuestra calathea es la araña roja siendo este insecto muy dañino. Se desarrolla en la mayoría de los casos cuando los niveles de humedad no se han mantenido de manera adecuada y el ambiente se ha hecho muy seco.
Para eliminar a la araña roja es necesario utilizar un paño que nos permita remover el parásito. El mayor atractivo de la calathea son sus hojas porque la mayoría de las especies no presentan una floración vistosa, por lo que debemos cuidarlas mucho.
Es recomendable realizar una revisión frecuente de nuestros ejemplares, no solo disfrutemos contemplando su belleza, también debemos aprender a disfrutar de sus cuidados. Una revisión periódica puede ser lo que marque la diferencia entre la vida y la muerte de nuestra planta, ya que al identificar de manera oportuna la presencia de alguna plaga, podemos actuar en consecuencia y evitar males mayores. Al momento de identificarlos y detener el ataque, debemos corregir la acción que promovió su presencia.
Las enfermedades que se pueden presentar en la calathea son generadas por la presencia de hongos, por lo que es muy recomendable hacer un tratamiento preventivo en el sustrato en el que se encuentra sembrada.
Consejos
Aún cuando ya en este punto del artículo podemos sentirnos todos unos expertos sobre el cultivo y cuidado de la calathea, nunca están demás unos consejos adicionales. Como ya hemos visto las hojas son lo más llamativo de la planta, siendo una planta de interiores, esta se encontrará expuesta al polvo doméstico, el cual está lleno de ácaros, por lo que aconsejamos retirar siempre el polvo que se deposita en las hojas de la calathea.
Con ello evitamos la presencia de patógenos, pero también evitamos que el proceso de respiración de la planta se vea afectado. Si bien las hojas son el centro de atención de las calathea, no recomendamos el uso de productos para aumentar su brillo, ya que estos pueden ser en realidad contraproducentes, ya que pueden afectar a los estomas. Los estomas son las células epidérmicas que se encargan de intercambio de gases, por lo que si llegamos a afectar a los estomas, comprometemos el proceso de respiración y por ende la fotosíntesis.
Si deseamos tener lo mejor de dos mundo en referencia al género calathea y adicional al hermoso y llamativo follaje, también deseamos lindas flores, recomendamos el cultivo de la especie Calathea Crocata porque es la única especie que muestra flores llamativas, las cuáles se presentan en una varas alargadas en donde se muestra unas bellas flores de color naranja.
Como podemos observar los cuidados de la Calathea no son muy exigentes, pero si debemos cuidar detalles, especialmente con la humedad ambiental y del sustrato. Con calathea siempre recomendamos realizar el riego con agua de lluvia, para evitar que se manchen sus hojas.
Otro consejo que no debemos pasar por alto es realizar el trasplante de calathea por lo menos una vez al año. También el agregar abono en las épocas de mayor frecuencia de riego es un consejo que no deben obviar, ya que de los nutrientes disponibles en el sustrato se encuentran más disponible y se lavan y pueden agotarse, por lo que la planta no podrá cubrir sus necesidades.
Para terminar les comentamos que uno de los lugares ideales para decorar con calathea es el baño, porque es de los espacios de la casa con mayor concentración de humedad, lo que le hace mucho bien a esta especie.
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